Propiedades gel de ducha para pieles atópicas
- 04/04/2018

Propiedades y beneficios del gel de ducha para pieles atópicas

Comenzaremos definiendo qué es la dermatitis atópica. Como muchos ya sabréis es una enfermedad inflamatoria que se caracteriza por sequedad de la piel, también llamada xerosis, picor y presencia de zonas de la piel enrojecidas, engrosadas, eccematosas y muy pruriginosas más frecuentemente en manos y pies, cara, codos y detrás de las rodillas.

La dermatitis atópica es una enfermedad crónica que cursa con brotes en los que aparecen estas zonas de la piel más eccematosas que hemos nombrado. Suele aparecer en la infancia y mejorar con la edad, aunque no ocurre lo mismo con la dermatitis atópica del adulto. También influyen en ella factores ambientales ya que el clima seco y frío suele empeorarla y, por el contrario, la exposición solar mejora las zonas de brote.

Por tanto, se trata de una enfermedad que requiere una serie de cuidados específicos y permanentes de la piel, tanto a diario como en épocas de brote.

Cómo elegir un gel de ducha para pieles atópicas o sensibles 

Podemos hablar de tres tipos de productos básicos para la higiene de la piel: los geles tradicionales, los oleogeles o aceites de ducha y los syndets.

Un gel de ducha es un producto de higiene de la piel cuya finalidad es limpiarla y para ello, los geles tradicionales incorporan jabón, cuya propiedad principal es disolver la grasa y eliminarla. Además los jabones contienen sustancias alcalinas que alteran el ph de la piel, que es ácido y es esta acidez la que confiere a la piel su función de barrera frente a las agresiones externas. De esta forma, si aplicamos un gel con jabón sobre una piel sensible, especialmente seca o atópica, estamos eliminando o agrediendo el manto lipídico y ácido protector de la piel y por tanto, empeorando esa sensibilidad y sequedad.

Para contrarrestar estos efectos, muchos geles incorporan hoy en día aceites con propiedades emolientes como la glicerina, o aceites vegetales como el de jojoba, el aceite de argán, etc.

Los oleogeles o aceites de ducha son productos de higiene muy variados pues los hay con y sin jabón, pero todos ellos se caracterizan por estar enriquecidos con productos que hidratan la piel y que protegen su manto ácido. Podemos citar aquí, el aceite de ducha de Aderma que no contiene jabón y aporta el estracto de Avena Rhealba como hidratante o suavizante. También el Oleogel de Eucerin que incluye el tampón citrato cuya finalidad es mantener el ph de la piel entre 5,4 y 5,9 para que ésta conserve sus propiedades protectoras de barrera.

 Por último hablamos de los syndets.  Este nombre viene de abreviar los términos “synthetic detergent” y hace referencia a aquellos jabones elaborados con detergentes sintéticos tensioactivos que respetan el manto lipídico de la piel porque son afines a los lípidos y repelen el agua. De esta forma, se trata de jabones más suaves que los tradicionales porque no agreden la piel, pero el término “geles sin jabón” o “soap free” está ampliamente extendido.

Los syndets contienen detergentes aniónicos suaves que consiguen atrapar la suciedad, aislarla y eliminarla con el agua sin agredir el manto graso de la piel. Además contienen en su mayoría ingredientes emolientes y humectantes y suelen carecer de perfume para evitar sensibilidades. Se convierten así en la mejor opción para el cuidado diario de las pieles atópicas y sensibles.

Consejos de uso dde los geles para pieles atópicas

  • Aplicar el gel con las manos en lugar de con esponja. Aunque las esponjas suaves pueden utilizarse, nuestras manos evitarán en mayor medida posibles irritaciones.
  • El agua debe estar templada.
  • Los baños deben ser cortos siendo mejor la ducha.
  • Utilizar toallas de algodón para el secado, que debe ser a toques y no frotando.
  • Aplicar a continuación una crema emoliente

 

Podemos sugeriros también que utilicéis prendas de algodón en lugar de lana o tejidos sintéticos.

Con todos estos cuidados y sabiendo los beneficios que un gel adecuado nos proporciona a la hora de cuidar y proteger nuestra piel, evitaremos irritaciones, reduciremos los brotes en las pieles atópicas y conseguiremos una piel más hidatada, suave y flexible.